Caminando vengo
Vengo de la guerra
Con las manos vacías
Y el corazón ardiente
Vengo de hacer la guerra con
Abel
De matar a Goliat y a diez
mil filisteos
De la huída de Egipto
De ser el rey de los Hunos
De las conquistas de
Alejandro Magno
De los amores de la egipcia
Cleopatra
Del Ágora
Del panteón vengo
Caminando la historia vengo
Llena de duelos y nostalgias
Vengo de la edad de cobre
Bronce
Hierro
De Esparta sanguinaria
De Grecia
De Viena
De ser Nerón
De ser Hitler
De ser Napoleón el estratega
vengo
De ser Salomé
Y recibir la cabeza de Juan
Bautista
De las cruzadas
De la inquisición
De la quema de brujas
De la Rusia imperial vengo
De los dolores de las madres
de mayo
De los martirios
De los campos de exterminio
De los genocidios vengo
Vengo de la guerra sin
trofeos
Ni cabezas rapadas
Porque del acto he pasado a
la palabra
De los genocidios
A mi propio genocidio
Mi guerra tiene nombre
Mis guerras devastadoras me
pertenecen
Estoy llena de campos
minados
De campos guerreros que se
escapan
Hasta hoy mi enemigo estuvo
afuera
Lo busqué en los desiertos y
selvas
En los montes y ciudades
Por eso siempre traje
Trofeos y cabezas rapadas
Me cansé de achacar a otros mis derrotas
Es cierto que me han crucificado como a Cristo
Es cierto
Las heridas todavía están abiertas
Las masacres en mi piel son escritura
Igualmente a negros e indígenas masacré
Míos los odios que les profeso
Estoy cansada de mis guerreros imperiosos
Cansada de respirar el aire enrarecido de los
tambores
Cansada
De ser mercenaria
Ahora mis guerras me
pertenecen
Por eso vengo de la guerra
Sin trofeos ni cabezas
rapadas
Ahora vengo de mis propias
guerras
Con las manos vacías y el corazón ardiente
Caminando la historia vengo